El otro día leí un artículo en el diario "El Día" que me hizo vomitar. En él se criticaba a Iñaki Gabilondo por ser de izquierdas, acusándole de ser un propagandista de la 'izquierdona'. Tiene gracia que se acuse a alguien de propagandista desde un periódico que día tras día vocifera que Gran Canaria debería ser poco más que desterrada e incita a los tinerfeños a votar lo que José Rodríguez y sus lacayos quieren.
Ya está bien de tanto ataque. Encima se quejan de que se les reprima en el Parlamento de Canarias. Normal. Son los únicos interesados en fomentar el pleito insular, pidiendo la independencia de Canarias para así poder hundir a Gran Canaria como ellos quieren.
Cuando Canarias sea independiente ha de ser con igualdad. Para eso las siete estrellas verdes están puestas en la bandera de forma circular, ninguna es mejor que otra. Pero eso para ellos no vale. Se pasan las siete estrellas verdes por las Cañadas del Teide. Si para que Canarias sea independiente se ha de pasar por el destierro de Gran Canaria prefiero no serlo. Si Canarias es un país soberano todas sus islas son iguales. Ninguna mejor que otra.
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