Me alegra ver que el Gobierno español ha decidido dar luz verde a una Ley que permita que aquellas personas que están sufriendo una enfermedad terminal puedan morir sin dolor. Ahora nos toparemos con el PP, HazteOir.org y demás organizaciones de derechas y religiosas exigiendo que esta Ley no prospere por ser eutanasia.
No vamos a perder el tiempo intentando explicar a esta gente que no es lo mismo morir sin dolor que administrar algo que acabe inmediatamente con la vida. Y digo que no vamos a perder el tiempo porque no lo entenderían, es demasiado complejo para su mente unidireccional y anticuada.
Ya lo dijo el Obispo de Pamplona hace tiempo. Jesucristo murió sin cuidados paliativos. Claro, y un montón de gente moría antes de escorbuto al viajar en barco por el Atlántico. Pero los tiempos avanzan y ya no vivimos en el año 30 d.C. Ahora no es necesario el sufrir. La ciencia nos permite morir tranquilamente. Pero para ellos no. Hay que sufrir aquí para disfrutar allá. ¿Allá dónde? ¿Dentro de la caja? ¿Dentro de la urna? No, gracias. Yo disfruto aquí. Y cuando se acerque mi hora espero que todo acabe sin dolor, sin sentirlo, tal y como vine
No hay comentarios:
Publicar un comentario